Desarrollo del personaje
Las historias son sobre una cosa: la capacidad de una persona para cambiar. Al final de la historia, terminarás con un personaje diferente al que empezaste, o con uno que no logró cambiar frente a los eventos que lo afectaron.
Descubrirás que las historias que carecen de este enfoque pueden sentirse huecas y vacías. Sin un desarrollo de personaje, podrías preguntarte cuál era el punto, incluso en los cuentos aparentemente más emocionantes o épicos.
Esto es lo que vuelve una película de superhéroes que salvan la tierra algo sin chiste. O bien, puede hacer que una partida de ajedrez se vuelva más fascinante e intrigante que cualquier escena de robo. El cambio es lo único constante en el mundo, entonces ¿cómo te aseguras de capturar este concepto?
Dos técnicas que puedes usar para crear arcos de personajes auténticos:
No lo hagas para que "se vea bien"
Un auto de lujo se estrella con un tren en movimiento. ¿Se ve bien? ¡Claro! ¿Es útil? Bueno…
Si solo incluiste la escena porque se ve bien, es posible que la reconsideres en el borrador final. Las escenas y momentos que lucen bien son definitivamente los instantes que se quedan en nuestras mentes, pero no son el principio y el final de nuestra historia. De hecho, realmente estos pueden romper el desarrollo del personaje que se ha establecido.
Siempre intenta evaluar conscientemente cada decisión que tomes y pregúntate por qué incluyes esa escena, luego representa lo que sucede a continuación de acuerdo con el personaje. ¿Cómo crees que reaccionaría luego de eso que hicieron o vieron? ¿Su pareja lo traicionó? ¿Qué sigue? Quizá hayas cambiado todo el curso de la historia por eso, pero así es como tiene que ser. De lo contrario, esa escena solo está ahí para verse bien y no afectó ningún cambio significativo.
Mapeo final del personaje
Los amantes del misterio pueden estar familiarizados con esta técnica modificada, en la que el autor elige quién lo hizo al comienzo de su proceso de planificación y desarrolla su historia hacia atrás desde allí.
En este caso, determina quién es tu personaje al final de la historia, incluso antes de pensar en quién es al principio. ¿Son osados y valientes?, ¿determinados e implacables? ¿Tienen el corazón roto? ¿Se sienten satisfechos?
Desde ahí, retorna. Si ellos terminaron siendo valientes, ¿cómo deben ser al inicio? ¿Tímidos? ¿Cobardes? ¿El miedo los paraliza? ¿Ambiciosos? Si ellos son osados desde el inicio al final, entonces ¿por qué no cambian y cómo mostrarías ese cambio? ¿Cambia el tipo de coraje que poseen? ¿Su comprensión de ello cambia? Por ejemplo: valiente y enfurecido es muy distinto a valiente y humilde.
Ahora que tienes tu principio y final, es tiempo de averiguar qué tipo de cosas harían que alguien se convirtiera en quien necesita ser. Si ellos comienzan siendo tímidos y se vuelven valientes, ¿por qué eran tímidos? ¿Eran víctimas de bullying de niños? Entonces necesitarán tener la oportunidad de demostrar que pueden superarlo. Probablemente, también necesitarán un evento en el que confronten ese pasado o algo que lo replique para que lo superen.
La técnica
¡Haz un bosquejo! Coloca un punto en la parte final, luego otro en el punto en el inicio, después dibuja un arco entre los dos y mapea los diferentes eventos que podría enfrentar. Si estás escribiendo sobre la marcha y apenas lo construyes, todavía necesitas conocer su arco general o tenerlo en cuenta, incluso si los detalles son imprecisos.
Necesitarás un arco para cada personaje principal cuyo cambio desees mostrar. Para mantener las cosas interesantes, también querrás comprender cómo interactúan entre sí, ahora que puedes ver sus líneas.
¿Tienes dos personas con el mismo cambio al final? Quizás tu historia se beneficiaría si tuvieras a dos personas que se desvían. ¿Tienes dos personas con el mismo arco de personaje? ¡Cámbialo! Piénsalo: ¿alguien que es tímido tendría la oportunidad de dar un paso al frente si lo emparejan con alguien que es demasiado valiente? ¿Podría esa pareja ayudar a sacar a la luz sus debilidades y la evolución del personaje aún mejor?
¿Cómo lo escribirás? ¡Depende de ti!